Vote por Gustavo Castro Caycedo Senado Cambio Radical 22  
 
  LA TV 22-01-2025 02:44 (UTC)
   
 
LA TV PUBLICA LE INCUMPLE A COLOMBIA
 
 
Tengo como una de mis metas en el senado, lograr que el Estado entienda su obligación de producir televisión social. Y expresa: “La responsabilidad del educador infantil está en tener bases sólidas para que la educación temprana a los niños, les sirva para la vida y no para la escuela”.
                                                                                                                      UNICEF
El desarrollo de la autonomía es una gran alternativa para educar en los valores, al niño, al hombre y a la comunidad.
 
No debe olvidarse que la comunidad reúne seres humanos para la transformación de su grupo social, con intereses comunes. Invertir en televisión pública, en la formación del hombre, produce la más grande rentabilidad social.
 
La televisión pública que debería ser primordialmente social y que no le está sirviendo como tal a Colombia, debe integrar al hombre colombiano a la sociedad y liberarlo de su aislamiento. Cada peso invertido en televisión social, en educación ciudadana es un peso invertido en futuro”.
 
La educación no formal que le compete a Señal Colombia, debe ser educación para la vida, incluidos los temas de la salud, la recreación y las relaciones humanas.
 
Señal Colombia debe estar en búsqueda de mejores niveles de formación, de comprensión de la realidad social, de consecución de la paz, de la convivencia y debe saber programar de acuerdo con las necesidades, expectativas, y prioridades de los colombianos, de manera permanente, continua, integral,, eso si con buenas producciones.
 
Todos los géneros de TV Educan
Podría decirse que todos los géneros de televisión educan en mayor o en menor grado, a veces más que la misma tele-educación formal, cuando esta se convierte en una “Cátedra Magistral”, en un “ladrillo televisivo”, opuesta a la educación que recrea y entretiene, como puede y debe ser.
 
La educación informal es una respuesta efectiva para una sociedad con grandes carencias sociales y puede ser bien manejada en Señal Colombia, convertirse en el gran agente del cambio.
 
Las vivencias del hombre, en la familia, en la calle, en el grupo social y en el entorno violento que le acompaña y en el que se forma y se desarrolla, pueden enriquecer la experiencia de los demás. Si la televisión pública sabe presentar las soluciones y mostrar las realidades, acompañadas de un mensaje que señale los modelos y los comportamientos no deseables y, los deseables, educará para la vida y esto, de acuerdo con la convicción de quienes la orienten, será enseñanza diaria, integral y permanente para ayudar a mejorar la calidad de vida de los colombianos.
 
En Colombia, donde solo el 47% de los jóvenes de 12 a 17 años puede ingresar a la secundaria, donde solo el 25% de los niños tiene acceso a la educación preescolar, donde hay 3 millones de analfabetas y solo un 11.5% de los colombianos tiene acceso a la Universidad, la televisión pública, muy a pesar del desprecio de quienes la programan para las minorías, tiene una misión obligatoria e histórica: construir una nueva y mejor sociedad.   
 
El proceso de transmisión cultural se articula a través de la familia, las comunidades, los centros educativos y los medios de comunicación social, pero muy especialmente de la televisión.
 
Estos mediadores se entrelazan y difunden valores, normas, costumbres, actitudes y conductas que le permiten al hombre colombiano y a la familia entender su entorno y establecer relaciones con los demás. Aquí se funden la educación y la cultura.
 
Colombia, según el informe de rectificación del DANE sobre el censo, dado a conocer el 12 de julio de 1.996, tiene 37´422.791 habitantes, de los cuales 25´850.570 viven en zonas urbanas y, 11´572.221 en sectores rurales. Es un país en desarrollo, de conglomerados sociales aislados, marginados, para los cuales la televisión pública representa un espacio vital, una ventana a su propia región, del país y el mundo.
 
La televisión pública -a pesar de su mediana cobertura- representa un vehículo de gran utilidad para capacitar a la población en beneficio propio y de las comunidades.
 
A pesar de las intenciones de distintos gobiernos, la Cadena 3 "hoy Señal Colombia no cumple con su finalidad.
 
Está plenamente sustentado este estudio que busca la juiciosa, consciente y substancial reforma de la programación, urgida por la Comisión Nacional de Televisión, basada entre otros elementos, en la consulta a los televidentes.
 
Según planteamientos de la UNESCO, “cuanto más se usen los recursos de un país para educar a su población, se vuelve más importante la televisión como apoyo. Ella se ha convertido en el elemento más eficaz en la educación y en la socialización de los niños y de los adultos con limitaciones”.
 
Es factor determinante su extensa cobertura educativa. Teniendo en cuenta su penetración, sus costos resultan bajos en comparación con los que demanda la educación tradicional.
 
Respuesta al derecho de la información
La televisión pública puede ser una contribución inigualable a las inmensas necesidades sociales en Colombia. Sus virtudes y su poder característicos la convierten en el medio más democrático para educar, y transmitir programación que proponga conductas socialmente deseables.
 
La televisión pública Señal Colombia, debía ser la respuesta del Estado colombiano al derecho a la información y al acceso a ella de los sectores menos privilegiados. Este es un derecho humano, básico, universal. La información representa conocimiento y sabiduría. El conocimiento es el elemento fundamental que fortalece el proceso de decisión del ser humano.
 
Es inigualable el poder de la televisión para educar, para culturizar, para socializar, la T.V. es el más formidable maestro, sin embargo, su mala utilización, su abuso, su desperdicio, perjudican a la sociedad y al Estado.
 
La televisión pública debe ser destinada a lo que ordena la Ley, por su alcance social y por las necesidades de los colombianos. La televisión pública debe guiar al niño y al adulto para que pueda filtrar y escoger lo mejor, lo más útil, lo mas positivo dentro de la múltiple gama de informaciones, mensajes y conocimientos que ofrecen los productores de televisión y debe hacerlo, porque Señal Colombia deberá ser diseñada para dar las respuestas más apropiadas a las prioridades, expectativas y problemas de nuestra sociedad.
 
Se trata de trabajar y producir lo que falta en la programación de nuestros canales y no programar lo que abunda en la televisión comercial, a lo cual debe competírsele más bien. Es absurdo seguir con un canal con índices pobres de teleaudiencia, lo cual representa un desperdicio grave del medio, a muy alto costo económico y social.
 
“Educar no es solo dar clases”
Bien se ha dicho que educar es transmitir inteligencia. Tarea democrática, masiva, permanente y diaria, que debe apartarse del concepto académico y asumir la realidad social, buscando mejorarla. “Educar no solo es dar clases”, es también ayudar a niños y jóvenes, a la familia, a enfrentarse con el mundo; es conducir, guiar, inculcar un sentido crítico; formar al ciudadano.
 
Señal Colombia debe integrar responsable y profesionalmente la televisión social, educando en salud, relaciones familiares, diálogos sobre cómo lograr la paz; propiciando el mejoramiento de la calidad de vida de los colombianos.
 
Ese es otro aporte de destino social contemplado por la Ley, para Señal Colombia. Deberá establecerse dentro de la franja social por lo menos un programa que desarrolle esta temática y que bien podría estar soportado por las ligas de consumidores y de televidentes que están trabajando ya en la pedagogía de la televisión, para la cual hay una incalculable audiencia, conformada por niños, padres y educadores.
 
La programación de Señal Colombia, independientemente de su intención de educar, informar, entretener y difundir cultura, debe mostrar modelos de sociedad, de hombre, de vida cotidiana, de relaciones familiares y sociales, de comportamientos, que tengan una valoración ética y social, una expresión positiva y útil, entendiendo que ello es fundamental para le reeducación del país, de la sociedad más violentos del mundo.
 
La televisión debe educar, presentar otras formas de vida y de maneras ideales positivas de ver el mundo, y de actuar en él. Ella tiene el poder de presentar modelos dignos de imitar y formas de solucionar problemas y conflictos, adecuada, tolerante y pacíficamente. Si tiene ese poder, por qué desperdiciarlo? ¿Por qué no competirle a la televisión comercial con estereotipos para la paz y la reconciliación y no para la violencia y el individualismo?
 
Los mensajes de televisión son un gran poder que bien utilizado podría transformar a nuestra sociedad caótica y violenta, mostrando formas más constructivas de actuar, de ver el mundo, en un proceso que no necesita de practica en el aula.
 
Resultaría necio suponer que sólo la escuela es espacio de aprendizaje, si existe el gran poder educador de la televisión, o creer que la televisión es sólo un espacio de entretenimiento. Se requiere un orientador, un conductor de la televisión pública, humanizado y con criterio social.
 
 
  Contenido
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
  Dame una mano
 
  CAMBIO RADICAL
  CON LAS MANOS LIMPIAS
  SU VOTO LO LOGRARA
32245 visitantes (80742 clics a subpáginas) ¡Aqui en esta página!
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis